Granuloma del embarazo
El embarazo trae consigo una serie de cambios importantes en el cuerpo de la mujer, y la salud bucal no es la excepción. Uno de los problemas que puede aparecer durante la gestación es el granuloma del embarazo, una afección poco conocida pero que puede generar preocupación si no se sabe de que se trata.
¿Estás embarazada? No dudes en concertar una cita para mantener tu sonrisa sana durante esta etapa tan especial. ¡Tu salud y la de tu bebé lo agradecerán!
Granuloma del embarazo
El granuloma del embarazo, también llamado épulis gravídica o granuloma piogénico, es una pequeña protuberancia que aparece en la encía, generalmente en el segundo trimestre de la gestación. Esta lesión es benigna, tiene una forma redonda u ovalada y puede variar en tamaño, desde unos pocos milímetros hasta más de un centímetro. Suele ser de color rojizo o púrpura, y a veces puede sangrar con facilidad, sobre todo al cepillarse los dientes o morder alimentos duros.
El granuloma del embarazo se desarrolla debido a la combinación de varios factores, como el aumento de los niveles hormonales (especialmente de progesterona y estrógenos), el mayor flujo sanguíneo y una inflamación preexistente en las encías. La placa bacteriana también juega un papel importante en la aparición de este tipo de lesiones, ya que las encías tienden a volverse más sensibles a la placa durante el embarazo.
¿Cuáles son los síntomas?
Los síntomas más comunes del granuloma del embarazo incluyen:
- Protuberancia en la encía que puede crecer rápidamente.
- Sangrado fácil al tocarla, cepillarse o usar hilo dental.
- Molestias o dolor al comer, especialmente si la lesión crece.
- Inflamación y enrojecimiento en la zona afectada.
Aunque puede resultar alarmante, este tipo de lesiones suele desaparecer por sí solo después del parto. Sin embargo, si el granuloma se agrava o genera demasiadas molestias, el dentista puede recomendar su remoción.
¿Por qué es importante visitar al dentista durante el embarazo?
Mantener una buena salud bucal durante la gestación es clave, ya que los cambios hormonales pueden aumentar el riesgo de padecer enfermedades como la gingivitis del embarazo, la periodontitis o la aparición de granulomas. Aquí algunos motivos por los que deberías hacer del dentista un aliado durante esta etapa:
Prevención de enfermedades
El embarazo aumenta la sensibilidad de las encías y la susceptibilidad a la acumulación de placa bacteriana. Un control dental regular ayuda a prevenir complicaciones como el granuloma, caries o enfermedades más graves como la periodontitis.
Cuidado de la salud general
Las enfermedades periodontales no solo afectan tu salud bucal, sino que también se han asociado con un mayor riesgo de complicaciones durante el embarazo, como partos prematuros o bajo peso al nacer.
Control de problemas específicos del embarazo:
Las revisiones dentales permiten controlar afecciones como la gingivitis y el granuloma del embarazo, evitando que estas empeoren o provoquen mayores molestias.
Orientación sobre el cuidado bucal:
El dentista puede ofrecerte recomendaciones sobre cómo mantener una buena higiene bucal durante el embarazo, como usar un cepillo de cerdas suaves, una pasta dental adecuada y el uso correcto del hilo dental.
Tratamientos seguros
Muchas mujeres evitan ir al dentista por miedo a que los tratamientos puedan afectar al bebé. Sin embargo, los procedimientos básicos como limpiezas, obturaciones y extracciones dentales son seguros durante el segundo trimestre. Siempre es recomendable informar al dentista sobre el embarazo para que tome las precauciones necesarias.
El granuloma del embarazo es una condición benigna, pero incómoda, que puede aparecer en las encías debido a los cambios hormonales y la acumulación de placa bacteriana. Visitar al dentista durante la gestación es fundamental para prevenir y tratar este tipo de problemas, asegurando no solo una buena salud bucal, sino también el bienestar general de la madre y el bebé.